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Cuando uno empieza a escribir, lo único que tiene es una historia. En ese sentido, escribir una historia es ya escribir. ¿Cuál es el proceso que hace que la materia se vuelva consciente? Nadie lo sabe, la biofísica todavía no encontró la respuesta; como buen neófito me doy una explicación suficiente: la práctica. Una constelación de partículas danzantes en una situación repetida no puede escapar a su destino; la conciencia es el destino de la práctica. Con la escritura sucede exactamente lo mismo.
Sergio Bizzio / Era el cielo (Buenos Aires, interZona, 2011)
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